– Cría y suelta de aves. Esta fase es compleja. Incluye la cría de los embriones rescatados del Pirineo aragonés en centro de cría en cautividad que gestiona la FCQ (CRIAH). Posteriormente, los jóvenes son llevados al centro de impronta natural en el Parque Nacional de Ordesa. Una vez alcanzan la maduración suficiente, son enviados a las instalaciones de hacking en los puntos de reintroducción, en donde permanecen hasta su liberación.

– Seguimiento de aves. Todas las aves son sometidas a un estrecho seguimiento. Primero en la zona de hacking, hasta que inician el periodo de dispersión juvenil. A partir de entonces el seguimiento vía satelital es fundamental. Durante todo el proyecto se obtendrán cientos de miles de datos, que permitirán conocer la situación de las aves en todo momento.